Enrique Bunbury sigue siendo El hombre delgado que no flaqueará jamás. A sus 50 años, una vez más en La Laguna, demostró por qué es una de las figuras más emblemáticas del rock hispanoamericano.
En la presentación que realizó ayer en un centro deportivo ubicado en la carretera Torreón San Pedro, durante dos horas el músico español hizo un recorrido por las canciones de su más reciente producción, Expectativas, alternadas con los éxitos de sus ocho álbumes de estudio anteriores y con unos más de su antigua banda, Héroes del Silencio.
A las 21:00 horas, con una puntualidad que sorprendió a varios fans que apenas llegaban y corrieron al escenario, se escucharon los primeros acordes de Supongo. Bunbury, con un traje color rojo con algunos detalles en color blanco, chaleco y pantalón de campana, apareció en el escenario. Así dio inicio La ceremonia de la confusión.
"Torreón, un verdadero placer estar aquí. Les vamos a ofrecer canciones de este nuevo álbum y un recorrido de otras épocas", saludó a los dos mil laguneros que acudieron a su llamado.
Siguió Con la actitud correcta y Los inmortales. Cuna de Caín, el más reciente sencillo que lanzó.
"Enrique, Enrique", los asistentes coreaban entre canción y canción en muestra del cariño que el público tiene al extranjero que por quinta ocasión pisa esta tierra.
Se oyeron El anzuelo, Parecemos tontos. Entonces llegó una versión renovada de El camino del exceso, con un claro sonido al Bunbury maduro y menos al Héroe del Silencio.
Enrique se quitó el saco para interpretar Despierta, de su álbum Palosanto.
Del Hellville Deluxe, se escucharon El hombre delgado que no flaqueará jamás y Hay muy poca gente.
"Vamos a hacer un poco de arqueología, vamos a tiempos prehistóricos", dijo Bunbury antes de sorprender con un irreconocible Héroe de leyenda.
En las entrevistas que el cantante ha ofrecido en la promoción de su noveno álbum de estudio ha dejado claro su propósito de resaltar la importancia del compromiso de los ciudadanos para lograr cambios sociales, ante un panorama que ha descrito como desolador. De ahí que el disco Expectativas tenga una atmósfera mucho más oscura en comparación a sus primeras producciones, donde exploraba los sonidos latinoamericanos.
"Hablemos de política exterior. Los gobiernos responden a los mismos patrones y esto queda reflejado en esta canción", dio la introducción para En bandeja de plata, donde canta: "Parece que si hay que elegir, dejar en las manos responsabilidad, pudiendo escoger entre dos o tres, preferimos al más subnormal".
Siguieron Mar adentro, De todo el mundo. A las 22:15 horas, presentó a su inseparable banda Los Santos Inocentes antes de despedirse por primera ocasión con Maldito duende, donde resaltó el arreglo del saxo de Santi del Campo.
Sólo bastaron unos minutos para que el camaleónico Bunbury regresara al escenario con un sombrero y llevara al público a la atmósfera del cabaret con Pequeño, El extranjero y la sentida Infinito.
Sí y Lady Blue fueron de las más coreadas.
"Un verdadero placer estar con ustedes, no se olviden de nosotros. Hasta siempre", se despidió el llamado Aragonés Errante. La constante cerró el concierto.
Encuentros de Bunbury
El cantante ha visitado varias veces la Comarca:
*25 de septiembre de 2012. Gira Licenciado cantinas.
*13 de octubre de 2011. Gira Las Consecuencias.
*18 de marzo de 2009. Hellville De Tour.
*28 de noviembre de 2004. El viaje.
(ÉRICK SOTOMAYOR)
